Ahora os cuento un poquito sobre la tarta, el bizcocho era de vainilla, que bañé con un almíbar de fresa y luego le hice una buttercream de fresa que también teñí del mismo color. Las torres estaban hechas de pastillaje, así que también se podían comer. Os pongo algunas fotitos más:
aquí una foto vista desde arriba...
Un saludo.
Hola guapa!!! Gracias por tu visita!
ResponderEliminarPedazo tarta! A mi me daria pánico tener que hacer algo así. Es una auténtica obra de ingenieria. Muy chula!
Muchísimas gracias Virginia!! Es una alegría recibir comentarios así, te dan mas ganas de seguir, así que estoy encantada de que te guste mi tarta y también feliz por tu comentario. Un besote guapa!!!
ResponderEliminarEs preciosa la tarta!!! Tiene que ser difícil hacer una tarta de este tipo, siéntete muy orgullosa del resultado porque te lo mereces. Un beso
ResponderEliminarAynnss Anita, que me sacas los colores!!! jejeee, pero una vez que te pones, tampoco es tan difícil...aunque el próximo sera sin duda mucho mejor.
ResponderEliminarUn abrazo:
Lidia cielo!!! estoy totalmente de acuerdo con mí vecinita Anita, te tienes que sentir super orgullosa de esta super tarta!!! te la has currado un montón cielo. Un besazo enorme!!!!
ResponderEliminarSonia cariñoo, muchas gracias por tu comentario, la verdad es que tiene un poco más de trabajo que una tarta mas normalita, pero vamos, que to` es ponerse, jejejee. Besitos guapa!!!
ResponderEliminarHola Lidia,
ResponderEliminarSí que hace ilusión hacer un castillo! Supongo que a todas nos hubiese gustado tener una tarta así de pequeñas...
Un besito!
Eso mismo pensaba yo cuando lo estaba haciendo....me hubiese encantado haber tenido un castillo de estos en mis cumples, hubiese sido lo masssss jejejee.
ResponderEliminarMuchos besitossss!
Hola lidia haces unas coas fantásticas yo he creado un blog hace muy poco y me encantaría que te pasaras, yo ya soy seguidora del tuyo la dirección es ladulceali.blogspot.com gracias seguimos en contacto chao
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